Hay punto detrás.
Inabarcable, sordo, violento.
Que no tiembla
cuando nosotros temblamos.
Ahí, su antihumanismo fundamental.
Lo que descuartiza al hombre,
lo vuelve su puro objeto.
Eso imposible siempre-presente-ahí
funda lo humano, lo sagrado
y el horror.
En torno a esa nada, somos.
Me pregunto si
por rebeldía u obediencia.
Por eso esta tan bien
Apocalypsis Now.
Aunque verle la cara a Kurtz
sea una ilusión humanista.
Kurtz es Dios.
Antropomorfización
de lo traumático-imposible.
Y lo más tremendo, lo traumático,
no es tanto que haya una voluntad
por encima de la nuestra
(a eso parecemos muy
familiarizados a diario)
sino el hecho de que esa voluntad
por encima de nuestra voluntad
no sea una voluntad.
Inabarcable, sordo, violento.
Que no tiembla
cuando nosotros temblamos.
Ahí, su antihumanismo fundamental.
Lo que descuartiza al hombre,
lo vuelve su puro objeto.
Eso imposible siempre-presente-ahí
funda lo humano, lo sagrado
y el horror.
En torno a esa nada, somos.
Me pregunto si
por rebeldía u obediencia.
Por eso esta tan bien
Apocalypsis Now.
Aunque verle la cara a Kurtz
sea una ilusión humanista.
Kurtz es Dios.
Antropomorfización
de lo traumático-imposible.
Y lo más tremendo, lo traumático,
no es tanto que haya una voluntad
por encima de la nuestra
(a eso parecemos muy
familiarizados a diario)
sino el hecho de que esa voluntad
por encima de nuestra voluntad
no sea una voluntad.
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